domingo, 18 de mayo de 2008

PASEO DEL ARENAL 1.874


MUELLES DE BILBAO 1.868


MERCADO DE SANTO TOMAS


IGLESIA DE SAN ANTON (II)

En el segundo templo que se construyó en 1.478, de estilo gótico, se puso un especial cuidado en buscar bien la roca y dotarle de una sólida cimentación, como así ha quedado demostrado en las mencionadas obras de restauración integral de la Iglesia (años 1.996 a 2.003).
El nombre de San Antón que se le dio a esta Iglesia, se debe al carácter preferentemente rural de la nueva feligresía.
En 1.548 se construyó, por el equipo de escultores que comandaba el artista flamenco Guiot de Beaugrant, la nueva y magnífica portada principal y renacentista, con puerta de entrada al templo (la que hoy en día está más próxima al Mercado). Columnas corintias, medallones, amorcillos, veneras y hornacinas artísticamente combinados y defendidos por un alto pórtico con su tribuna, llamada Balcón del Consulado, forman un conjunto único, inmortalizado por los lienzos del pintor bilbaíno Losada.
En las hornacinas, que estuvieron muchos años vacías, pudieron verse, desde 1.892, las magníficas tallas de San Pedro y de San Pablo, debidas al genial Anchieta (el Miguel Angel vasco). Dichas tallas, desde hace algunos años y con motivo de una de las últimas restauraciones, fueron colocadas en el muro del Presbiterio y, en su lugar, pueden verse otras dos tallas de inferior valor artístico.
Sobre la citada puerta de entrada a la Iglesia, puede leerse: “Agregada a la Basílica de San Juan de Letrán”, que es la Catedral de Roma.
Dentro del Bilbao típico de entonces, conviene recordar que, en 1.680, se construyó un edificio adosado al templo de San Antón y perpendicular a la nueva y magnífica portada principal y renacentista que hemos comentado, en donde se instaló el Consistorio de la Villa y el Consulado. Esta construcción permitió la formación de la Plaza Vieja, tan inmortalizada por el pintor bilbaíno Losada, de la que partía, entonces, el puente de San Antón (hoy se encuentra situado detrás del templo). Al inaugurarse, en 1.892, el actual Ayuntamiento de la Villa, se derribó este edificio adosado y perpendicular, desapareciendo así la Plaza Vieja citada.
En 1.774 se inició la construcción de la nueva torre de las campanas. La primitiva, a la que en el siglo XVII se añadió un flamante chapitel con su giralda, fue apeada y, en su lugar, se alzó la que hoy contemplamos. El campanario es uno de los mejores ejemplares del barroco fulgurante dieciochesco y está coronado por cúpula y linterna, rematado con la giralda, fundida en cobre por un calderero de la calle bilbaína Ascao.
Tanto la portada principal como el campanario, tal y como se ha visto, no pertenecen al estilo gótico de la Iglesia.
Las últimas aportaciones arquitectónicas se producen en 1.902, con la inauguración del nuevo pórtico, frente a la calle Ronda, con otra entrada al templo, la nueva Sacristía y amplias dependencias parroquiales. En el pórtico y en las fachadas hacia el puente, se aprecia el arte gótico isabelino, que no desdice del estilo del templo.

INAKI AZKUNA, ALCALDE DE BILBAO


Recibe Iñaki Azkuna en tarde de resaca terrorista. Es un jueves que ETA ha revestido de luto. Otra muerte ha bajado de nuevo al alcalde a las escalinatas del Ayuntamiento de Bilbao para expresar la rabia con silencios. Ahora, en su despacho, habla. De todo. Hay tiempo: casi dos horas de un discurso vitalista, enérgico a veces. Ameno siempre.
-Alcalde, recupero alguno de sus célebres titulares, «a la gente le preocupan más las aceras que las banderas», para pasar revista al estado de la villa. ¿Cómo encuentra Bilbao desde la perspectiva de su tercer mandato?
-Cada día mejor. Algunos nostálgicos dicen que ha perdido fuerza. Hombre, la fuerza metalúrgica que hablaría Zunzunegui quizás, pero es que los bilbaínos también tenemos derecho a disfrutar de paseos y a ver las flores. Estamos construyendo una ciudad mucho más cómoda, para los de dentro y para los que llegan de fuera. La calidad de vida es hoy fundamental, y a eso vamos; a una ciudad cada vez más amable, más plural y, a ver si lo conseguimos, con mayor convivencia.
-No ha escatimado en tela para la bandera de Bilbao. ¿Supuso realmente para usted un mal trago colocar la de España en el Consistorio?
-No, me costó una sentencia, y yo cumplo las sentencias. Llegado el momento, se acabó. No soy un talibán. Siempre he creído que cuantas menos banderas, mejor. Pero todas, ¿eh? La española, la otra, la otra y la otra. Por convicción personal, no me gustan los banderizos. Bastante mal le hicieron a este país.
-Ya, un asunto de la esfera privada. Lo traigo a cuento porque uno de los temas que más polvareda ha levantado de sus últimas intervenciones públicas han sido las alusiones al color político de algunos dirigentes del movimiento vecinal.
-Demos la vuelta a la frase. Si hubiese cuarenta asociaciones comandadas por representantes del PNV y estuvieran saliendo permanentemente en los medios diciendo qué bien lo hace Azkuna, qué diríais. Pues lo que diría yo, que es tongo. Yo he entendido siempre las asociaciones de vecinos como entes independientes, sin perjuicio de que haya gente que tire más hacia un sitio que otro. Que voten al que quieran, pero que sean personas sin carné político; es decir, sin obediencia a un partido.
-Ellos dicen que sus ataques son cortinas de humo para no entrar al fondo de los asuntos, al debate sobre la manera de resolver los problemas que cualquier ciudad arrastra o genera.
-No, aquí hay un problema de fondo. Esta gente, en cierto modo, ha querido tener una relación bilateral con el Ayuntamiento, y en la estructura actual del Ayuntamiento eso no es posible. Nosotros estamos divididos en distritos, y en esos foros hay representantes de los partidos y asociaciones. Es ahí donde se ventilan los asuntos. Ellos son los auténticos representantes de los distritos, los que al final deciden las cuestiones que les atañen. Y punto. Esta otra gente lo mismo habla de la incineradora, que del tranvía, que del canal, que de todo. Claro, es el contrapoder del Ayuntamiento, y yo no lo voy a aceptar.
-¿El equipo de gobierno vive la efervescencia del asociacionismo vecinal como un sarpullido molesto?
-No, no. Yo estoy hablando de la organización. Hay 1.300 asociaciones en Bilbao. Se han unido veinte agrupaciones, y tienen todo el derecho, pero, lo siento mucho, yo acepto la representatividad de los distritos.
-¿Qué límites pondría a la participación ciudadana?
-Cuidado. ¿Cuánta gente entre los 350.000 vecinos participa en los asuntos municipales? Aproximadamente, 2.000. El resto vive su vida. La participación ciudadana no se puede llevar al límite del 'todo lo que hagamos tenemos que discutirlo con los ciudadanos'. Eso sería un sistema asambleario, y es imposible. Tiene que haber un sistema reglado.
-Sabino Arana y el ruido; la Plaza del Gas y el crematorio; San Ignacio y los rellenos del canal de Deusto; Rekalde y el metro... ¿Cuál de estos binomios le inquieta más y cuáles son las políticas para hacerles frente?
-Todos. Aunque algunos tienen ya solución. El metro está prometido para Rekalde. Sabino Arana soporta ruido, pero conoce el límite temporal para su arreglo. El crematorio es de obligado cumplimiento por dos sentencias. Una nos dice que demos la licencia, y si los jueces ordenan eso es porque no hay ninguna ley sanitaria que lo prohíba. Por tanto, en principio, tengo que pensar que no hay demasiado peligro para la salud. La segunda permite instalar crematorios en cualquier parte del núcleo urbano. Si, como quieren algunos vecinos, nosotros diésemos el cementerio para que el tanatorio lo gestione, mañana cualquier otra empresa nos podría poner en la misma tesitura. ¿Y qué le damos entonces? Yo el cementerio no lo suelto. Es de todos los bilbaínos.
-Los rellenos del canal de Deusto sustancian una de las polémicas más candentes de la actualidad local. Los socios de su equipo de gobierno van de la mano, pero con apreciables matices. Ibon Areso lo tiene muy claro y Julia Madrazo parece inclinada a darle una vuelta al proyecto de Zorrozaurre. ¿Usted, qué opina?
-En primer lugar, la operación Zorrozaurre es la más importante de los quince próximos años en Bilbao. supone la expansión de la ciudad hacia el mar, hacia donde podemos, dicho sea de paso. Y es una operación en la que puede haber más de 5.000 viviendas en uno de los mejores sitios de la villa. Los rellenos no son más que la delimitación de las calles que rodean la lámina de agua. La ley dice que en los 20 metros situados junto a esta lámina no se puede construir. No lo haremos, claro; serán paseos. Pero en los tramos que tienen 50 o 70 metros sí. Y no sólo pisos. Habrá servicios, escuelas, centros culturales, y aquella promesa que hicimos de un centro tecnológico urbano emparentado con el de Zamudido se está ya estudiando. Por tanto, ese tipo de actividad de bata blanca sí tendrá cabida. Lo que no habrá es lo que ha dicho alguien, creo que ha sido el representante del PSE, que pide menos vivienda y más industria. Ni al que asó la manteca se le ocurre poner industria en un terreno urbano y tan caro.
-En la trastienda de asuntos como el del canal, las urbanizaciones de Garellano, Olabeaga o Bolueta, late para algunos la necesidad de redefinir el modelo de expansión de Bilbao. Máxime en tiempos de crisis feroz en el sector de la construcción, que parece comprometer el pilar que ha soportado hasta ahora el desarrollo de la ciudad: la vivienda.
-Pero nosotros confiamos en que la crisis haya comenzado a remitir antes de empezar a edificar.
-¿Y el mercado podrá luego absorber esa importante partida inmobiliaria para hacer viables tan complejas operaciones urbanísticas?
-El mercado inmobiliario, por los siglos de los siglos amén, lo absorberá. Con las necesidades tan grandes que tenemos aquí, un 50% de vivienda protegida en Zorrozaurre... ya me explicarás; y un 60% en Bolueta; y un 50% en Garellano. A ver dónde encuentras promociones de ese tipo. Claro que tiene futuro.
-Caso IMD y La Peña. Puso de manifiesto serias irregularidades en la gestión de áreas tan sensibles para los ciudadanos como los polideportivos o los estacionamientos. ¿Considera ya encauzados los problemas?
-Que quede claro: allí no se ha llevado nadie un duro. Aquello fue un despropósito, un desorden. No se gestionó bien. Se ve perfectamente que no estuvo bien estudiado el proyecto, se ha dejado cosas el arquitecto, ha habido que poner más recursos durante varias ampliaciones de capital... Así de claro lo digo.
-¿Bilbao es cada vez más o menos segura?
-La veo bastante bien, con unos parámetros absolutamente normales para una ciudad de su tamaño. Mejorables todavía, y por eso creo que hay que seguir dando mucha caña. Pero, básicamente, creo que se puede decir que Bilbao es seguro.
-Con todavía demasiadas zonas peligrosas para las mujeres, como acaban de denunciar.
-Desde que soy alcalde, habremos mejorado unos 200 puntos oscuros. Si en algo hemos gastado es en iluminación, y vamos a seguir gastando. Obras y Servicios tiene perfectamente delimitados una veintena de puntos más para actuar. Pero en muchos casos tendremos que expropiar, porque los vecinos no nos ceden esos callejones y patios.
-Usted es un firme defensor del control de las ayudas sociales. ¿El sistema da para tanto y para todos?
-Yo creo que una sociedad subsidiaria, dependiente del Estado, no es buena. Por eso me parece muy bien que se controlen las ayudas sociales. Y, sobre todo, que haya un compromiso de las administraciones públicas para que toda persona que reciba una prestación tenga también la obligación de buscar trabajo. Si no, esto es un desastre. Para que cobren los que más necesitan no pueden cobrar los que tienen la picardía de engañarnos, que hay unos cuantos.
-¿Qué le falta a Bilbao para dejar de ser una ciudad de tránsito? El 'efecto Guggenheim' sigue tirando del carro del turismo casi en exclusiva.
-Y el modelo va a seguir sirviendo, a pesar de las últimas faenas. En pocos años vamos a tener más posibilidades: la Alhóndiga, un pabellón de deportes, un frontón... No digo que por sí mismos vayan a atraer turismo, pero serán aditamentos.
-2010. La villa formará parte de un selecto club de 55 ciudades que mostrarán su proyecto de urbe en la exposición universal de Shanghai. ¿Especialmente ilusionado con la cita?
-Mucho. Si nos han elegido es porque la rehabilitación de Bilbao les ha parecido extraordinaria. Vamos a presentar el mejor pabellón posible y llevaremos empresas, porque también es importante que el mundo conozca lo que construimos.
-Oiga, ¿lo suyo con Txema Oleaga es una espina coyuntural o la explosión de una cuestión larvada?
-Bah, hay que quitar importancia a esas cosas. Yo no tengo nada ni contra Oleaga ni contra el PSE. En el Congreso han estado día sí y día no diciéndose barbaridades, y por una vez que nos calentemos nosotros... Yo creo que los plenos de Bilbao han sido, en general, de guante blanco. Basagoiti y yo nos hemos cascado mucho más y, sin embargo, ha tenido menos trascendencia.
-Al margen de afinidades políticas, da la sensación de que se lleva mejor con Basagoiti que con Oleaga.
-Pues no lo sé. Yo me llevaba bastante bien con Dimas Sañudo. Tenía con él una buena relación, y sigo teniéndola. Mejor que con Oleaga.
-El PSE bilbaíno le acusa de propiciar la ruptura de la política de grandes consensos en asuntos vertebrales para el desarrollo de la ciudad.
-Pero qué consensos, si Txema Oleaga no nos ha votado absolutamente nada a nosotros, no nos ha apoyado ningún presupuesto. Desde que yo soy alcalde y Oleaga es responsable de su grupo en la oposición, no ha estado de acuerdo en nada serio.

sábado, 17 de mayo de 2008

PASEO DE LOS CAÑOS


PARQUE DE DOÑA CASILDA


SAN ANTON


IGLESIA DE SAN ANTON (I)

La Iglesia de San Antón, denominación popular de San Antonio Abad, que es su advocación precisa, es un templo gotico de finales del siglo XV. Su historia y ubicación, a orillas de la Ría de Bilbao, junto al Puente del mismo nombre, el Mercado de la Ribera y anteriormente el viejo Ayuntamiento, en pleno Casco Viejo, le convierten en el más popular templo bilbaíno, hasta el punto de que aparece retratado en el escudo de la villa.

Casi 300 años antes de levantarse la iglesia ya existía en el mismo solar una lonja o almacén de mercancías fluviales. Cuando en 1300 Don Diego López V de Haro, undécimo Señor de Vizcaya, otorgó Carta Puebla a los pobladores de la ribera del río Ibaizábal, la antigua lonja fue incorporada al recinto urbano recién creado
Alfonso XI, el Justiciero, rey de Castilla y León (1.312-1.350), invadió con sus tropas el Señorío de Vizcaya, entrando en la Villa y, con el fin de consolidar su posición, comenzó a levantar, en 1.312, un alcázar sobre el almacen de mercancias fluviales, junto al puente gótico que unía las dos pueblas (la ferrona y la marinera), con las que, en 1.300, Diego López de Haro fundó la Villa de Bilbao.
Al ajustarse una paz entre la Corona y el Señorío, posiblemente antes de lo previsto, la fortaleza fue devuelta a la Villa sin concluir las obras y el Concejo acordó su inmediata demolición y, al mismo tiempo, la construcción, en ese mismo siglo XIV, de un templo extramuros que sirviera para la atención espiritual de la población allende el Puente y el arrabal de Ibeni.
A propósito de lo que hemos denominado “templo extramuros”, conviene recordar que en las obras de restauración integral de la Iglesia (años 1.996 a 2.003), se descubrió (Junio 2.002) un imponente muro de 2 metros de anchura, que se adapta al lecho rocoso, rodeando la llamada roca de Atxuri, y que, al parecer, enlaza con el lienzo de la muralla que procede de la calle Ronda (esto puede probar que el templo no quedaba fuera de la ciudad amurallada).
Tal templo extramuros empezó a construirse en 1.366 en el mismo solar, por supuesto, que ocupó el alcázar. Era de una sola nave de planta rectangular y cubierta abovedada. La primera misa se celebró el día 5 de agosto de 1.433, festividad de Nuestra Señora de las Nieves, con el templo totalmente terminado. Sin embargo, este primer templo, conforme al estudio de lo visto tras las obras de restauración integral ya citadas, tuvo una corta vida por problemas de construcción y apenas pudo mantenerse abierta 50 años, durante el siglo XV.

80 INDIGENTES SOBREVIVEN A LA INTEMPERIE


En su mayoría no responden al estereotipo clásico del mendigo, pero sí a un denominador común: la calle. Ya no se les identifica como los 'sin techo'. Ahora, están en situación de exclusión residencial. Más de 80 personas viven y duermen a diario a la intemperie en Bilbao cobijados en edificios abandonados, portales, parroquias o galerías comerciales. Lugares que se han convertido en una alternativa para personas que carecen de domicilio fijo y que no pueden, por falta de plazas, o no quieren acceder a una de las cerca de 140 camas de acogida que ofertan durante todo el año cuatro albergues de la ciudad (Elejabarri, Lagun Artean, Hontza y Centro de Noche de Baja exigencia). «No disponer de una casa es una de las manifestaciones más claras de exclusión social», asegura el concejal de Acción Social del Ayuntamiento de Bilbao, Ricardo Barkala.
Un equipo realiza periódicamente un informe, «un 'ecomapa'», para determinar y conocer la evolución del número y la situación de las personas que viven a la intemperie en Bilbao. La radiografía es compleja. «Hablando de números, ya no es habitual, aunque todavía los hay, encontrar en la calle a gente mayor, con problemas de alcohol, con enfermedades mentales y una deficiente higiene personal, como se podía ver hace unos años», asegura el director del albergue municipal de Elejabarri, Txema Duque. «Ahora, nos enfrentamos a personas que están de paso en la ciudad, muchas de ellas inmigrantes, que están aquí una temporada y se van», destaca, por su parte, Ricardo Barkala.
Es en la temporada invernal, sobre todo, cuando los responsables municipales aprecian una mayor fluctuación del colectivo, «quizá, porque el tiempo es aquí más benévolo que en el interior», explica el responsable de área.
El inacabado tanatorio de Basurto, que aspira en un futuro a convertirse en un aparcamiento en el caso de que su propietaria, la compañía privada Funespaña, llegue a un acuerdo con el Ayuntamiento de Bilbao, y el puente de la autopista en Elejabarri son los puntos neurálgicos más utilizados por los indigentes.
Según datos del 'ecomapa' de la primera quincena del pasado mes de abril, el equipo municipal de intervención «localizó» a 81 personas «viviendo en la calle». Por distritos, Basurto-Zorroza, con un censo de 27 personas, encabezaba el ranking de ocupación y el esqueleto de hormigón del tanatorio daba cobijo a 19. En segundo lugar, se situaba Rekalde con 24, de los que 16 pernoctaban bajo el puente de la A-8. Abando acogía a 13, repartidos en su mayoría entre en el puente del Sagrado Corazón y las galerías Isalo, en Ercilla.
Por su parte, La Merced, con siete, era el punto de reunión en la zona vieja de Bilbao; mientras que Garamendi albergaba a los 6 indigentes detectados en Begoña. El Camino Morgan, en Deusto; y el jardín de la estación de Zumalacárregui, en Uribarri, con un censo mínimo, de una persona en cada una de las zonas, ocupaban los últimos puestos del mapa elaborado por el Ayuntamiento. El único distrito que dio negativo esta quincena en el 'ecomapa' fue el de Otxarkoaga-Txurdinaga, con cero registros.
Gente difícil
Algunos de estos grupos han abandonado ya sus asentamientos. En concreto, los jornaleros que «acampaban» bajo el puente de la A-8. Sin embargo, desde el área de Acción Social se reconoce la existencia de un grupo fijo, «de unas 25 personas», que llevan tiempo en las calles de Bilbao, y aseguran que se trata «de la gente más difícil». «En torno al 70% lo hace porque le gusta vivir en la calle», asegura Barkala. «Es muy difícil contactar con ellos. Les visitas, hablas, tratas de establecer una relación verbal, les animas que vayan a ducharse... y así y todo, prefieren continuar en esta situación», añade.
Para que uno de estos marginados acceda a la red de servicios que oferta el Ayuntamiento se necesita de mucha paciencia y, «ser muy constante». Los educadores de calle aseguran que los éxitos llegan «en forma de goteo», y que «haciendo un trabajo durante mucho tiempo», se logra su realojo. «El pasado día 1 de mayo, precisamente, conseguimos que una de las personas que más tiempo llevaba viviendo en las calles de Bilbao entrase en el albergue de Elejabarri, y esto, para nosotros, constituye un gran logro», afirma Txema Duque.
Otros no tienen tanta suerte. Ayer, precisamente, la plataforma 'BesteBi', junto a otras asociaciones contra la exclusión residencial y a favor de las personas 'sin hogar', recordaron durante quince minutos a Omar B., un joven argelino de 26 años en exclusión residencial cuyo cadáver fue encontrado ahogado en la ría. La plataforma denunció que seis personas han fallecido en los últimos 12 meses en Vizcaya, «lo que supone la tercera parte de las muertes de este tipo ocurridas en España en este mismo periodo».

viernes, 16 de mayo de 2008

MERCADO DE LA RIBERA


HOSPITAL DE BASURTO 1.940


HUELGA MINERA 1.903


LA CATEDRAL DE SANTIAGO ( y IV)

No debemos olvidar que es el edificio gótico más importante de Vizcaya y uno de los más ricos del País Vasco, lo que justifica la realización de las obras citadas.
Y como consecuencia de ellas:
1.- Se ha mejorado notablemente la iluminación y la claridad en el templo, mediante la limpieza de las paredes y de las vidrieras que rodean toda la iglesia.
2.- Se ha remodelado el Presbiterio, que presenta una base octogonal con escalón y sobre dicha base y al fondo se encuentra la Cátedra con seis asientos a cada lado. En el centro el ara de piedra sobre 12 columnas y más hacia delante y hacia la izquierda, un ambón apoyado en 7 columnas.
Debajo de este Presbiterio se encuentran las excavaciones comentadas en los párrafos 3º y 4º de esta Ficha, con una puerta en la parte trasera.
3.- Se ha recuperado el pavimento original del siglo XVII.
4.- Se ha sustituido la tracería de madera de los ventanales por otra de cantería.
5.- Se ha reparado el Coro y acondicionado para recibir el nuevo órgano.
6.- Se ha instalado un nuevo órgano de estilo clásico nórdico, apto para interpretar música del siglo XVII hasta nuestros días. Se ha bautizado con el nombre del compositor vasco Jesús Guridi, quien fue maestro organista desde 1.918 a 1.939, de la entonces Parroquia Santiago. Tiene 2.260 tubos de estaño y plomo, con capacidad para producir sonidos excelentes. Una vez realizados los trabajos de armonización, así como las últimas operaciones de montaje, y tras pasar un período de aclimatación a la humedad y a la temperatura de la Catedral, fue inaugurado en la Navidad de 2.002.
7.- Se ha restaurado la aguja y el cuerpo de la torre.
8.- Se ha limpiado la fachada principal.
9.- Se ha recuperado la Puerta del Angel, dejándola en un estado de conservación inmejorable y poniendo fin a un grave proceso de deterioro que venía padeciendo.
10.- Se ha rehabilitado el pórtico y se ha cerrado el mismo con una hermosa y vistosa verja.
11.- Se ha abierto la puerta del pórtico que estaba cerrada, restaurándola eficazmente.
12.-Se ha restaurado el claustro del siglo XVI, que ahora puede ser contemplado en toda su belleza y con una gran luminosidad.
13.- También se han restaurado los casi 250 sepulcros.
14.- Y muy posiblemente, podrán contemplarse, en breve, el basamento y la primera capilla que se construyó en este terreno, con anterioridad a la fundación de la Villa de Bilbao.

HOTELES DE BILBAO OFRECEN HABITACION POR HORAS A EJECUTIVOS QUE NO HACEN NOCHE


Lejos del trajín que registran las grandes ciudades como Madrid y Barcelona, Bilbao también se ha convertido en lugar de paso para ejecutivos. Cada día recalan en la capital vizcaína un buen número de visitantes exclusivamente por asuntos de negocios. No vienen de turismo, pero sí forman parte de la clientela fija de los hoteles.
Se hospedan por unas horas, las necesarias para tomar un descanso previo a una reunión de trabajo o a un evento, para echar una siesta después de una comida con otros colegas o, simplemente, para matar el tiempo a la espera de que salga el avión que les lleve de regreso a casa por la tarde.
La mitad de los principales hoteles de Bilbao oferta tarifas 'use day' -de uso diurno- como denominan a este tipo de hospedaje en el hotel Ercilla. Están pensadas para clientes de paso y oscilan entre los 50 y los 100 euros, aunque en este caso hay mucha flexibilidad, «dependiendo de las horas de uso que necesiten». La demanda de las habitaciones por horas por parte de ejecutivos y personal de negocios es una práctica 'in crescendo' en muchas ciudades españolas. En las grandes urbes es una fórmula habitual desde hace algún tiempo, un fenómeno que a estas alturas ya no es noticia. En otras más pequeñas -caso de Bilbao o Sevilla- aún causa sorpresa, pero se está demostrando más que necesaria. En la ciudad hispalense, por razones obvias, los hoteles alquilan habitaciones especialmente partir del mediodía «para acoger a los huéspedes que huyen de las horas de calor de la sobremesa». No es el caso de Bilbao.
En Vizcaya las reservas de habitaciones durante el día rondan la decena al mes en cada establecimiento. «No es aún muy habitual, pero sí hay gente que lo demanda porque no tiene sentido pasarse horas deambulando por la ciudad», asegura Javier Campuzano, director del hotel Domine. Un 5% de sus clientes ocupan la habitación en horario diurno y pagan por ello unos 100 euros, el 75% del precio de la tarifa de noche.
Algunos clientes pasan las horas 'muertas' en el Sheraton, donde alojan durante la mañana y la tarde a «gente de negocios con un alto poder adquisitivo», describen. Entre los demandantes de hospedaje diurno, muchos pilotos y azafatas de avión que deben hacer escala en la ciudad y técnicos informáticos que trabajan en grandes empresas durante la noche cuando cesa la actividad en la empresa y luego quieren echarse unas horas al alba.
La siesta
En Bilbao, sin embargo, el de las habitaciones por horas sigue siendo un fenómeno «minoritario», advierte Fernando Sánchez Crespo, presidente de Destino Bilbao. «Se utiliza más en los hoteles que se encuentran cerca de los aeropuertos, donde se alojan turistas en tránsito, que en el centro de la ciudad», asegura. De todos modos, aunque en goteo, también los hoteles de la villa reciben a estos nuevos clientes. «Muchas veces se celebran reuniones privadas de negocios, ésta es una práctica muy frecuente». Así, para quedar a salvo de miradas indiscretas, las empresas optan por reservar por un rato habitaciones que dispongan de salón para charlar reposada y discretamente.
Sea una u otra la razón, las condiciones de hospedaje son distintas. En función de los horarios, las tarifas diurnas pueden suponer desde el 100% del precio por pasar una noche, a la mitad. «En general la tarifa se reduce un 50 o 60%», calculan en Destino Bilbao.
Los hoteles Hesperia, por ejemplo, ofrecen la posibilidad de ocupar por unos 75 euros una habitación «durante ocho horas a elegir, entre las diez de la mañana y las ocho de la tarde», comenta la directora comercial de la cadena en la zona norte, María José Gordo. Otros establecimientos de la villa no exigen hora de entrada ni de salida, «aunque debe hacerse dentro de unos límites razonables», advierten. Y es que, lejos de peticiones estrambóticas u horas inusuales, las franjas en las que se concentra la, por el momento, escasa demanda «son las de la siesta», coinciden fuentes del sector.
«Encarece el servicio»
Los hoteles que ofertan este servicio no registran entradas todos los días, por lo que sólo unos pocos se han animado a incorporar este tipo de tarifas en la 'carta' de servicios del hotel. Los que no lo han hecho todavía alegan que no es un negocio rentable por el momento. «Encarece mucho el servicio, ya que exige contar con personal extra puntualmente para atender a estos clientes que van a estar solamente unas horas y luego se van», justifica Alberto Gutiérrez, director general del hotel Carlton.
De todos modos, Fernando Sánchez Crespo precisa que, pese a no anunciar este servicio, «todos los establecimientos te van a vender una habitación por horas si la pides». Y quienes las piden, coinciden los profesionales consultados por este periódico, son hombres y mujeres de negocios y no tanto parejas, a quienes se ha asociado tradicionalmente el negocio de las habitaciones por horas en hoteles y hostales. «Decir que ya no hay parejas que utilizan este servicio sería mentir, pero su influencia es realmente mínima, menor si cabe en hoteles de cierta categoría», aseguran.

jueves, 15 de mayo de 2008

TRANVIA A SANTURCE


SALON OLIMPIA


PLAZA NUEVA


LA CATEDRAL DE SANTIAGO (III)

El interior catedralicio responde a una planta de cruz griega (aunque con la obra del Coro se asemeja ahora más a una cruz latina), con una nave central y dos laterales más bajas, adornadas con capillas. Consta de crucero y esbelta girola tras el Altar Mayor, que se une a éste por arcos apuntados con capillas poligonales de diversa amplitud. La existencia de crucero y girola permiten una relación con el gótico europeo (normando).
Las bóvedas, de crucería gótica parcialmente policromada, presentan nervaduras y terceletes, descansando sobre columnas cilíndricas, con pilastras adosadas.
Existe, también, por debajo del nivel de las ventanas, un triforio abalconado con antepecho calado que rodea toda la nave central, crucero y ábside. Este triforio, junto con la girola, son elementos típicos de las iglesias de peregrinación.
En cuanto a ventanas, esta iglesia cuenta con 16 ventanales y 3 rosetones con vidrieras identificadas con el espíritu del gótico. Uno de los rosetones, el situado a la derecha del crucero, es triangular con sus tres lados curvos.
Las capillas a las que nos hemos referido anteriormente, son 15 y están alojadas entre los contrafuertes (con una altura menor que las naves laterales), excepto las 5 del centro de la girola, que fueron ya planificadas desde el principio. Su distribución se lleva a cabo por el contorno de la iglesia.
En las capillas pueden verse varias imágenes de Cristo, de la Virgen y de los santos y santas. Destacan la Piedad, con una hermosa talla barroca de hacia 1.642, y el Cristo del Amor, que es una bella talla atribuida a Guiot de Beaugrant, de hacia 1.543 (ya comentada).
Además, pueden contemplarse varios sepulcros góticos, una torre eucarística (sagrario) del siglo XV y la pila bautismal.
Merece también deleitarse en la segunda capilla de la derecha, según se entra por la Plazuela de Santiago. Su cubierta está formada por una crucería estrellada, que arranca de ménsulas con la representación tetramórfica de los cuatro Evangelistas (hombre, toro, águila y león).
El patronazgo de Santiago sobre la Villa data desde su fundación. Sin embargo, fue confirmado formalmente ante la Santa Sede en 1.643, siendo Papa Urbano VIII.
Esta iglesia fue consagrada Basílica en 1.819, a instancias del bilbaíno Cardenal Gardoqui, y declarada Catedral en 1.950, tras fundarse en 1.949 la diócesis de Bilbao, si bien, su primer obispo, Casimiro Morcillo, consagró su altar mayor en 1.955. También ha sido declarada Monumento artístico nacional.
Hemos hablado de obras de restauración en el tercer párrafo de esta ficha, que comenzaron en 1.997. Estas obras, que han constituido un exhaustivo proceso de cirugía interna y limpieza exterior, terminaron en el año 2.000, abriéndose al público la Catedral el día 25 de Julio, festividad de Santiago.

LOS RELLENOS DE DEUSTO CARECEN DEL INFORME OBLIGATORIO DE LA AGENCIA VASCA DEL AGUA

La aprobación de las modificaciones del plan general en el último pleno del Ayuntamiento de Bilbao, celebrado el mes pasado, daba carta blanca a los rellenos en el canal de Deusto, actuación rechazada por los vecinos de la ribera de San Ignacio y Elorrieta, que temen que los edificios que se construyan en el terreno ganado al agua «taponen» el barrio y volatilicen las posibilidades de crear un espacio de ocio. A la negativa ciudadana se han sumado también las reticencias de la Demarcación de Costas, organismo dependiente del Gobierno central, que ha cuestionado los usos residenciales que se quieren dar a los suelos robados al canal, y también la reiterada petición del los partidos de la oposición del Consistorio bilbaíno -PSE y PP- para que el proyecto no avance sin el aval de un consenso político y ciudadano ahora inexistente. Pero estas objeciones al plan no son las únicas. La Agencia Vasca del Agua, dependiente del departamento de Medio Ambiente del Gobierno Vasco, sostiene ahora que los rellenos no cuentan con el «obligatorio informe de impacto hidrológico» que ellos deben hacer o aprobar, en caso de que se encargue a una firma privada.
Según han recalcado, «el año pasado» elaboraron un dossier para evaluar las consecuencias que acarrearía abrir el canal para convertir la actual península de Zorrozaurre en una isla. Pero este informe, que dio el beneplácito a la operación, no incluía «los rellenos ni sus consecuencias, con lo cual es preceptivo elaborar un nuevo análisis o rehacer el actual, porque cualquier alteración en las márgenes del canal podrían variar el resultado y lo que antes valía, quizá ya no sirva», advierten fuentes de la Agencia Vasca del Agua, que destacan que ellos son quienes tienen la competencia de validar los análisis hidrológicos necesarios para acometer grandes actuaciones urbanísticas.
Garantizar la seguridad
Su celo en esta tarea es comprensible. En la mente de los profesionales de esta agencia que inició su andadura 'oficial' a principios de año, pero que es heredera de la Dirección de Aguas están aún muy presentes las inundaciones del 83, el mayor drama que ha vivido Bilbao en las últimas décadas. «Cualquier precaución es poca, en aquella ocasión hubo 35 fallecidos. Después de aquello, el Gobierno vasco se hizo con la competencia de controlar los cauces, que antes era del Ejecutivo central, y desde entonces se ha puesto todo el esfuerzo en garantizar la seguridad señalan las mismas fuentes. Por eso, ahora nuestro dictamen es preceptivo en proyectos importantes».
Así, la eliminación o colocación de puentes y otros obstáculos que puedan modificar el fluir del agua, el desvío de cauces y su ensanchamiento o reducción mediante rellenos, como en el caso del canal de Deusto, son algunas de las operaciones que no se pueden hacer sin su supervisión. «Es para que no haya consecuencias indeseadas que pongan en peligro a bienes y personas», matizan fuentes de la agencia, que, ante todo, quieren huir del alarmismo . «Simplemente, no queremos caer en errores del pasado ni dejar construir en zonas objeto de inundabilidad, porque luego hay problemas e incluso se tienen que derribar edificios», destacaron. Uno de los últimos ejemplos de construcciones abocadas a la piqueta por este motivo es el de unas viviendas de Iurreta «que se edificaron en el cauce del río».
Por su parte, la comisión gestora del plan de regeneración de Zorrozaurre, proyecto que engloba los rellenos, manifestó ayer que un estudio que encargó a una ingeniería privada el año pasado para comprobar los efectos de la apertura del canal sí contempla la dinámica del agua en caso de que el cauce se reduzca tras los rellenos «hasta una anchura de 75 metros». «Y se comprobó que el estrechamiento del canal no influía en nada», sostienen. En cuanto a la necesidad de que sea la Agencia Vasca del Agua la que determine si la operación es segura y no una empresa ajena al ámbito público, fuentes técnicas de la gestora enfatizaron que «trabajan mano a mano» con ellos y manifestaron su sorpresa de que el organismo dependiente del Gobierno vasco considere «incompletos» los análisis que se han hecho hasta ahora para evaluar el riesgo de inundabilidad. «Por ejemplo, próximamente trataremos conjuntamente el tema de la apertura de puentes que saldrán de la futura isla de Zorrozaurre», avanzaron.
En este sentido, Ibon Areso coincide plenamente con los postulados de la comisión gestora. Aunque afirma con modestia «que su conocimiento sobre estas cuestiones técnicas es somero», afirma que la lámina de agua frente a San Ignacio tendrá unas dimensiones que permitirían «desaguar sin problemas».
El afán del Ayuntamiento y de la comisión gestora -compuesta por el Consistorio, Gobierno vasco, Puerto y dos promotoras privadas- por tranquilizar a los vecinos de la zona con estas explicaciones no ha surtido demasiado efecto. La plataforma ciudadana que se opone al relleno sigue señalando la cuestión de la inundabilidad como uno de los «puntos negros» del plan. Asimismo, manifestaron ayer su inquietud por la colocación de unas boyas en la zona del relleno, así como por la presencia de un empleado que realizaba mediciones con un GPS en la franja que se pretende rellenar. La aparición de maquinaria en el enclave, junto con una dársena flotante, de las que se utilizan para realizar trabajos en láminas de agua, disparó también las alarmas sobre el comienzo inminente de los rellenos. Sin embargo, fuentes del Puerto desmintieron categóricamente que los trabajos fueran a empezar y atribuyeron estas maniobras a «actividades rutinarias de mantenimento» que no tienen nada que ver con el controvertido proyecto.


miércoles, 14 de mayo de 2008

IRALABARRI


JARDINES DE ALBIA


PALACIO ESCAURIAZA


LA CATEDRAL DE SANTIAGO (II)

En cuanto a su exterior, en 1.650 se edificó la primitiva fachada del templo.
En 1.716 se erigió, sobre el primer cuerpo de piedra, otro muy elevado y gallardo, un pretencioso campanil. En 1.817, ante el temor de su derrumbamiento, se demolió. Y en su lugar se levantó un torpe armatoste de ladrillo, feo y raquítico. Estaba asociado a las guerras carlistas y figura en grabados de la época.
Finalmente en 1.885, se le encomendó al prestigioso arquitecto bilbaíno Severino Achúcarro la total reparación de la fachada y la construcción de la airosa torre neogótica que hoy podemos admirar y que la terminó en 1.890. Es como una flecha que se dispara al cielo. Tiene, esta torre, 11 campanas dispuestas en 3 niveles, 4 de repique y 7 de volteo, de los años 1.890, 1.895 y 1.916.
En algún momento se proyectaron dos torres gemelas a ambos lados de la puerta principal del Templo. La sensación de agobio lo desestimó.

La fachada principal, que se asoma a la Plazuela de Santiago, es también neogótica. En ella puede verse una portada ojival, discretamente abocinada, que se adorna, en sus arquivoltas, de grecas de follaje que trepan hacia la ojiva. Cubre esta portada un arco conopial rematado en una cardina. A ambos lados, sobre dos repisas góticas y bajo finos doseletes del mismo estilo, descansan las figuras de los Santos Pedro y Pablo. Sobre la portada corre una balconada y, encima, el clásico rosetón insustituible en las catedrales góticas.
Destacan dos veneras a ambos lados del citado arco conopial, que acreditan su sabor jacobeo. También pueden verse, arriba y a ambos lados del clásico rosetón, dos medallones que representan los elementos que identifican a la iglesia como Basílica.
A la derecha de esta fachada principal (orientación Sur), se encuentra el gran atrio o pórtico del templo, característico de las iglesias vascas. Renacentista y de figura trapezoidal, fue construido en la segunda mitad del siglo XVI. Este pórtico es de gran amplitud, con 6 arquerías gigantes de medio punto, apoyadas en robustas pilastras que sostienen las bóvedas y que sirven, al mismo tiempo, de contrafuerte exterior del templo.
Dentro de este pórtico se encuentra una bella entrada gótica lateral, que comunica con el crucero. Tiene tres arquivoltas. La primera se adorna con figurillas adaptadas a la curvatura del arco y las otras dos se abren hacia la puerta en forma de arquitos. Sobre esta entrada puede verse un escudo policromado de la Villa, como símbolo del patronazgo que ejercía sobre esta iglesia.
Una vez dentro y sobre esta misma puerta, se encuentra una imagen de la Inmaculada de hacia 1.783, de Francisco Arizmendi. Y enfrente, sobre las puertas de entrada al claustro, se halla otra imagen referida al apóstol Santiago de Pérez Comendador, de 1.955.
El claustro es un cuadrilátero reducido, adosado a la Iglesia por el Norte. Su estilo es el gótico tardío de finales del siglo XV y principios del XVI, con un jardín central. Dispone de amplios ventanales que se abren al ya citado jardín, con profusión y variedad de sus tracerías. Sobre los muros, corre una crestería calada y entreverada por pináculos y gárgolas. Este claustro comunica con la calle Correo a través de la Puerta del Angel. Acoge a dos retablos muy elaborados de hacia 1.900 y tres sepulcros, uno de ellos del siglo XVI.
Dicha Puerta del Angel es de estilo gótico florido con elementos decorativos isabelinos y fue construida a principios del siglo XVI. Era la puerta de los peregrinos. Es moderadamente abocinada y partida en dos por el parteluz que se prolonga en forma de pináculo sobre el tímpano adornado de relieves geométricos. La portada se cubre de un arco conopial, rematado en una cardina. El conjunto queda encuadrado por dos contrafuertes que terminan en floridos pináculos. En el interior del vértice de dicho arco conopial, destaca una venera jacobea, que despedía a los romeros al abandonar el templo para enfilar la ruta hacia Compostela.
Volviendo al interior, al retablo de Beaugrant le sustituyó, en 1.805, un altar de jaspe cerrado al exterior por verjas de hierro y bronce. Recientemente se llevó a cabo una acertada reforma, desapareciendo lo antes citado y, en su lugar, se colocó un ara de piedra en el centro del Presbiterio, que quedó limpio y despejado.
También sufrió importantes reformas el Coro en el siglo XVIII. En efecto se alargó la iglesia y se edificaron, a ambos lados del Coro, la Capilla del Cristo ya mencionada y la Sacristía. La característica de este Coro es que no está situado en un espacio central, a nivel del suelo, como es habitual en las Catedrales. Mas bien es el Coro de una iglesia parroquial, como así se definió entonces.

NUEVE INSPECTORES CONTROLARAN LA OCUPACION DE LA VIA PUBLICA EN BILBAO

La oficina municipal de Uso de Espacio Público de Bilbao, creada durante este mandato, ultima la creación de un cuerpo de inspectores que controlará que las condiciones de las licencias otorgadas se cumplan según lo establecido. Terrazas, veladores, contenedores, mercadillos y eventos de todo tipo se verán de esta forma sometidos a exámenes sorpresa. Se espera que el nuevo equipo de trabajo esté operativo al cien por cien «a finales de este año», según apuntó su director, Tomás del Hierro.
La unidad estará formada, en un principio, por ocho inspectores, uno por cada distrito, y un jefe de grupo. Estos pasarán a engrosar la plantilla de la oficina, formada en la actualidad por 16 personas, la mayoría administrativos. Pese a que hasta el término del ejercicio no se prevé contar con el cuerpo al completo, del Hierro anunció que la idea es disponer de al menos tres inspectores para agosto, mes en el que se celebra la Aste Nagusia, época de mayor ocupación de vía pública, entre actos programados, txosnas y terrazas, tanto de bares como de hoteles. Hasta ahora, cada una de las áreas que concedía permisos de este tipo, tales como Obras y Servicios o Salud y Consumo, contaba con su propio equipo de inspectores, e incluso ciertas revisiones corrían a cargo de la Policía Municipal. Este era el caso de aspectos como las terrazas, enmarcados dentro de la concejalía de Urbanismo y Medio Ambiente. En este sentido, las personas que conformarán el nuevo equipo se rescatarán de los diferentes departamentos municipales.
Programa GIS
La oficina de Uso de Espacio Público, dependiente de Alcaldía, tramita al año entre 9.000 y 10.000 expedientes. La tarea a desarrollar por el futuro grupo de inspectores será la de revisar cada una de las licencias 'in situ'. Entre los aspectos que se tendrán en cuenta se encuentran, por ejemplo, el de asegurarse de que las medidas son las correctas, de que no se invade más espacio del estipulado o que se cumplen los horarios. «Intentaremos que todos los permisos que se concedan sean revisados en el mismo año», comentó Tomás del Hierro. En caso de no respetar la normativa, el Consistorio podrá retirar el permiso o imponer una sanción administrativa al infractor.
Los inspectores contarán, además, con una herramienta de trabajo que facilitará en gran medida su tarea diaria. El personal de la oficina municipal está implantando en estos momentos en los ordenadores un programa informático denominado GIS, que funciona como un sistema de posicionamiento de eventos. Su uso es muy sencillo. El primer paso es dotar de contenido a la base de datos, es decir, incluir toda la información concerniente a los diferentes permisos: número y duración de la licencia, ubicación, medidas etc. Además, el programa adjuntará un dibujo a escala del espacio ocupado de la vía.
«En el caso de una terraza marca la distancia con respecto a la fachada, la anchura e incluso el número de mesas y sillas que debería tener en función de los metros», explican desde la oficina. Así, cuando un inspector tenga que revisar un expediente, dispondrá de una imagen muy cercana a aquello con lo que debería encontrar al desplazarse hasta un punto determinado.

martes, 13 de mayo de 2008

RIBERA DE DEUSTO


PUENTE DE LA MERCED


PLAZUELA DE SANTIAGO


LA CATEDRAL DE SANTIAGO

Para hablar de esta Catedral, necesariamente tenemos que mencionar a la ermita sobre la que está construida, ermita que existía antes de la fundación de la Villa en el año 1.300. La Carta Puebla fundacional de la Villa de Bilbao cita a las iglesias de Begoña y Santiago.
Esta ermita fue la primera construcción religiosa de dicha Villa y, sin duda, fue lugar de tránsito de peregrinación hacia Compostela y donde se detenían los peregrinos que se desviaban por el País Vasco, haciendo el Camino de la Costa.
La construcción de ese templo románico primitivo es un indicador del desarrollo alcanzado por el núcleo de población de la orilla derecha del Nervión, en la Baja Edad Media.
Sin embargo este templo fue arrasado por un pavoroso incendio, y en 1.374 el Papa Gregorio XI dispensaba indulgencias a quien diera limosnas para reconstruirla
La ampliación del templo que iba a ser de estilo gótico, comenzó allá por 1.379. Era patente una evidente influencia francesa, ya que, según parece, se levantó sobre planos de un arquitecto normando. Bilbao mantenía ya un intenso comercio con los puertos de Normandía y de Flandes. Esta primera parroquia bilbaína estuvo adosada a las tres primeras calles de Somera, Artecalle y Tendería.
Aproximadamente por 1.404, se inician los trabajos del coro.
Tres puertas comunicaban el templo con el exterior: la primera se abría al Sur, en la parte que daba al mercado (la que hoy se encuentra en el pórtico); la segunda al Oeste en la portada principal (hoy Plazuela de Santiago) y la tercera era la puerta del claustro (hoy conocida como Puerta del Angel), orientada al Este y por la que salían los peregrinos después de haber venerado al Santo.
El primer inventario de enterramientos data de 1.379 y el segundo de 1.402. Consta que consiguieron sepultura propia en Santiago, familias como: Arbolancha, Zurbaran, Leguizamón, etc.
Esta iglesia acogió importantes acontecimientos. Unos de índole religioso como la visita y predicación de San Vicente Ferrer allá por 1.408. Otros de índole civil como la aprobación de las Ordenanzas de la Villa en 1.483.
En 1.535 el Cabildo hizo un contrato con el escultor Guiot de Beaugrant, quien empezó a labrar una verdadera obra de arte en un retablo para la iglesia.
Este escultor era de origen flamenco y fue activo en el País Vasco entre 1.530 y 1.549. Su arte se relaciona con el estilo Juan de Juni (escultor francés documentado en España desde 1.533) y es claramente manierista en algunos aspectos. Inició el retablo de Santa María de Portugalete (1.533); trabajó, como hemos dicho, en el retablo de Santiago, en Bilbao (1.533-1.546) y también en Valmaseda y en Cenarruza. Creó escuela con seguidores en la región.
Desgraciadamente, aquel fabuloso tapiz de madera hubo de ser apeado en el siglo XVIII, porque la carcoma lo había estropeado y amenazaba ruina. Quedan algunas tallas sueltas que pregonan su primitivo esplendor. Una en la Capilla del Cristo, en la misma iglesia, en la que se encuentra el Cristo que muy posiblemente coronaba el magnífico retablo citado. Otras en la Sacristía de la Catedral, como es el caso de los 4 Padres de la Iglesia latina, y en el Museo arqueológico y etnográfico, junto a la iglesia de los Santos Juanes.
Por otra parte, esta iglesia sufrió varias catástrofes, como los incendios de 1.571 y 1.641, o la inundacion de 1.593, que causaron graves destrozos y forzaron a reconstrucciones.

UNA TORTUGA EN LA RIA

La fauna de la ría tiene un nuevo habitante: la tortuga. Hasta ahora, los animales más exóticos avistados surcando las aguas del Nervión habían sido cangrejos, chinchillas, lubinas y hasta un cisne, aunque éste último fue un turista ocasional que desapareció sin dejar rastro. Una garza o garceta sobrevuela cada día el cauce en busca de algún pez que pescar. Su presencia representa el mejor ejemplo de que la ría tiene cada vez menos contaminación. «Está más limpia de lo que parece», asegura Pablo Cermeño, de la asociación Ambar, para el estudio de la fauna marina.
Ayer a mediodía el curioso visitante fue una tortuga, con un caparazón de unos 50 centímetros de diámetro, que atrajo la atención de los bilbaínos, especialmente de los niños. «Cuando se asustaba, metía la cabeza bajo el agua y se ponía a bucear», describía uno de los entusiasmados testigos. Todos se preguntaban por el origen del reptil.
Especie protegida
Para Cermeño hay dos posibles respuestas, la más improbable, que sea una tortuga marina arrastrada por una corriente hasta las entrañas de la ría, o que se trate de una mascota, cuyo dueño «se ha cansado, o se le ha hecho muy grande y la ha abandonado». En este caso, podría tratarse de una Galápago doméstica, originaria de Centroamérica.
Una patrulla de la Policía Municipal comprobó que la tortuga estaba en la ría, pero les dio el esquinazo. «No se dejaba coger».
Desde el Centro de Recuperación de Animales de Gorliz advierten de que podría tratarse de una «especie protegida, como la mayoría de las tortugas», pese a ser unas de las mascotas más comunes. «No hay suficientes inspecciones; hay plazas en las que se venden tortugas de agua y de tierra pero eso no significa que sea legal», sostienen.
Aunque soportan duras condiciones, la tortuga podría correr peligro en la ría. «Es mejor sacarla», dicen desde Gorliz. O incluso suponer un peligro para el ecosistema, «hay especies que colonizan el medio y acaban con las especies naturales».

lunes, 12 de mayo de 2008

MOLINO DE ARTXANDA


PUENTE DEL PERRO TXIKO


VENDEDORAS DE BACALAO


EL CONCEJO Y LAS LUCHAS POR EL PODER (y IV))

A finales del siglo XV se mencionan en la villa todos los oficios más importantes que pudieran encontrarse en una ciudad mercantil y comercial: corredores, asteros, argenteros, ferreros, rementeros, arneceros, espaderos, linterneros, bosladores, cordeleros, ancleros, puchereros, ballesteros, tejedores, etc.
Según su concejo: “...mas de las tres quartas partes de los vos de la dha villa heran oficiales que se mantenían de su oficio”.
En 1.468 el concejo hará solicitud de ensanche del recinto urbano, facultad para imponer nuevos impuestos y una casa de la moneda.
Sin embargo entre gamboínos y oñacinos continuaron por algún tiempo y terminaron, con carácter general, durante el reinado de Enrique IV, el Impotente, y XXIII Señor de Vizcaya, desde 1.454 hasta 1.474. Este rey tuvo que desplazarse personalmente a esta región en 1.457, dirigiendo las Hermandades (agrupaciones de campesinos, habitantes de las Villas y algunos hidalgos opuestos a los Parientes Mayores), para pacificarla, destruyendo sus principales fortalezas y desterrando o confinando a muchos de los Pariente Mayores.
Así, en 1.468, el Concejo de Bilbao destruyó las casas que tenían en la Villa algunos banderizos. Entre ellos los Abendaño y los Basurto.
En 1.475, los Reyes Católicos y XXIV Señores de Vizcaya (1.474 a 1.504), conceden a Bilbao el apelativo de Noble Villa.
“...por ende es mi mrd e voluntad que desde aquí adelante para siempre jamás la dicha villa de bilvao se llame e yntitule la noble villa de bilvao...”.
Y comienza a manifestarse una fuerte hostilidad de las anteiglesias vecinas hacia el pujante y privilegiado bastión de la burguesía que es Bilbao.
Asi en 1.477 se nombran alcaldes de hermandad, con mando sobre soldados, para reprimir las fechorías de los linajes.
En 1.478 los Reyes Católicos deben intervenir de nuevo, desterrando de Bilbao a varios vecinos por participar en la guerra de familias.
En 1.483 (año en que la villa comienza su ensanche por las tierras bajas del Arenal y San Nicolas) la reina Isabel llegó a Bilbao, jurando los fueros en el portal de la Tendería, siendo alcalde de la villa Pero López de Vitoria.
Ese mismo año los reyes envían a la villa al licenciado Garci López de Chinchilla, quien da comienzo a la redacción de un cuaderno de ordenanzas, un medio para desterrar los conflictos surgidos de la existencia de bandos y parcialidades. Los parientes mayores no lo aceptaron de buen grado, excepto Arbolancha, por lo que les fue prohibida la entrada en Bilbao con más de seis hombres.
En 1.488 existían en Bilbao dos parroquias (Santiago y San Antonio Abad) y la vecina de Begoña. Los oratorios, capillas o ermitas de San Nicolás y los Santos Juanes no eran parroquia todavía. El arcipreste de Santiago será reconvenido por los reyes en esa misma fecha, prohibiéndosele en adelante que acogiese en la iglesia y su cementerio a los hombres armados que allí entrasen pidiendo asilo.
Será entre 1.499 y 1.500 cuando se dé por concluido el proceso de señalamiento de límites entre Bilbao y las anteiglesias vecinas, llegándose a una serie de acuerdos que, poco a poco, acabarían por traer la paz a Bilbao y al Señorío.
Es en 1.526 cuando se actualiza el Antiguo Fuero con el nombre de Fuero Nuevo de Vizcaya. Este texto fue confirmado en Valladolid, por el rey Carlos I, el 7 de Junio de 1.527, tal como lo hicieran con el Fuero Viejo sus antecesores: Enrique IV, Isabel la Católica, Fernando el Católico y Juana “la loca”.
El Fuero de Vizcaya declara repetidamente la hidalguía de todos los vizcaínos. Esta declaración de hidalguía suponía, en la Edad Media, alcanzar el máximo respeto a la dignidad personal y comportaba notorias ventajas:
1.- El hidalgo está libre de impuestos.
2.- El servicio militar queda subordinado a unos condicionamientos, porque un hidalgo no puede ser alistado sino con un sueldo.
3.- A los vizcaínos, aunque resulten acusados de cualquier delito, no se les puede dar tormento ni amenaza de tormento.

domingo, 11 de mayo de 2008

MUELLE DEL ARENAL


PASEO DEL ARENAL


PUENTE DE ISABEL II


EL CONCEJO Y LAS LUCHAS POR EL PODER (III)

Los mercaderes castellanos, principalmente burgaleses, intervendrán de manera señalada en el proceso de desarrollo de la villa. Necesitados de un buen puerto para sus exportaciones de lana a Francia, Inglaterra y Flandes, Bilbao se encargará de capitalizar todo este tráfico, siendo poco después naturales de la villa y no castellanos los principales representantes de este comercio en Flandes, el destino principal de la lana de Castilla.
La contratación principal de este producto será dirigida desde Bilbao a partir de ahora.
La importante producción de hierro y la pesca tienen también gran importancia en el desarrollo económico de todo el Señorío durante esta época. En Bilbao existirá la Rentería, lonja y bolsa del hierro, junto al puente de San Antón, siendo numerosos los artesanos que se dedicaban a su trabajo: ancleros, rementeros, azereros, cerrajeros, claveteros, cabilleros, espaderos, lombarderos, etc.
Las fraguas se situarán en Ascao, entonces un arrabal de la villa; los maestros de lombardas y otras armas de fuego tendrán sus campos de tiro en Ibein y en Allende el Puente.Los astilleros se desarrollan también durante esta época.
En Bizkaia los principales son los de Bilbao, Portugalete, Lequeitio, Ondárroa, Bermeo y Plencia. Todos estos puertos irán desarrollándose conforme aumente la importancia de la industria pesquera.
En la cámara de la villa de Bilbao existía una presencia continuada de armadores y mercaderes desde 1.435, fecha en la que la paz con los linajes trajo la sustitución de los representantes de las grandes familias por los de la burguesía ciudadana en todo lo concerniente a la dirección de la villa.
Los astilleros se desarrollan también durante esta época. Estaban situados en ambas riberas del Nervión, en Portugalete, Baracaldo, Abando, Deusto y Bilbao principalmente. Los de la villa se hallan situados en el lugar denominado "rebal de sant nicolás".
En toda esta zona existe un permiso general para establecer edificaciones provisionales (astilleros, tejavanas y estufas para derretir la brea). Todo aquél que desease construir una embarcación solicitaba permiso del Concejo y comenzaba sus obras, una vez concluida la botadura de la nave debía reparar todos los desperfectos causados en la zona. Las zonas más importantes destinadas a la construcción de navíos eran las siguientes: Varadero de Marzana, en Bilbao la Vieja, Astillero de Basurto de Acha, o Ripa , Astilleros de la Vega (“Campa de los Ingleses”), Astillero de San Mamés, Zubelasinguira en Zorroza, y Deusto.
En general, todos los astilleros de la ría se denominaban como Astilleros de Bilbao, ya que éste era el nombre común del abra, ría y canal.

sábado, 10 de mayo de 2008

TRANVIA DE TRACCION ANIMAL


TEATRO ARRIAGA


ROMERIA DE SAN JOSE EN DEUSTO 1.911


EL CONCEJO Y LAS LUCHAS POR EL PODER (II)

El comercio se había implantado como fuente principal de riqueza en Bilbao. Si hasta entonces se daban circunstancias de bandidaje o piratería, a partir de ahora a tales conductas se impondrá las penas más graves.
La hostilidad de los linajes hacia la villa se verá sustituida por las disputas de las anteiglesias vecinas de Bilbao contra la misma. Uno de los motivos era la gran extensión dada a la jurisdicción de Bilbao, que se extendía sobre terrenos pertenecientes a aquellas, mucho más allá del casco urbano de la población. Otra causa era el privilegio exclusivo de comerciar (relativo a mercados, carga y descarga) que tenía a lo largo de toda la ría, lo que motivaba que todo el tráfico de mercancías de la zona se dirigiese en su totalidad a Bilbao.
Asi en 1.442 los bilbaínos serán derrotados por los baracaldeses en Retuerto y Landaburu.
Ese mismo año la villa sufre un incendio y cinco años después una gran inundación, que se repetirá otros cinco años más tarde. Sin embargo, los habitantes de la villa siempre la reconstruyen.
En 1.452 se redactan de una manera completa los Fueros de Vizcaya, recogiendo fielmente los usos y las costumbres existentes. Era un ordenamiento jurídico completo, que hoy se conoce con el nombre del Fuero Viejo de Vizcaya.
Hasta 1.458 no se solucionará, si bien parcialmente, la situación con un convenio entre Bilbao y las anteiglesias de Arrigorriaga, Baracaldo, Abando y Zarátamo.
Aunque el período que sigue será casi tan rudo como el anterior. Según las crónicas, se trata de una época de “...oposiciones, fuerzas é robos é otros desaguisados.”
La villa se integra en las Hermandades o agrupaciones de defensa formadas dentro del Señorío. Sin embargo, un hecho sí que había cambiado con respecto al período anterior y es que puede decirse ya que Bilbao es la población más importante de toda Bizkaia y la que recoge la casi totalidad de su tráfico mercantil.
Y, cómo no, la actividad del Concejo continúa. En 1.463 adquiere diversas propiedades en la villa y ordena la instalación de un reloj en la torre de San Antón. También se fija la obligación que tenían todos los vecinos de acudir a las obras públicas en caso de necesidad o desgracia.

jueves, 8 de mayo de 2008

LA RIA A SU PASO POR EL BARRIO DE LA PEÑA


INAUGURACION DE LA PLAZA DE TOROS DE INDAUTXU (1.909)


CARCEL DE LA GALERA


EL CONCEJO Y LAS LUCHAS POR EL PODER (I)

Durante tres siglos, las instituciones encargadas de regular la vida de los bilbaínos fueron dos: el Ayuntamiento y el Consulado de Bilbao existente de 1.511 a 1.829 (ya comentado)

EL CONCEJO

Los diferentes cargos oficiales del Concejo quedaron definidos en el fuero de fundación.
Así existían los alcaldes, de elección anual, en número de dos (uno por el bando de Oñaz o procastellanos y otro por el de Gamboa o pronavarros), siete regidores (uno por cada una de las calles de la villa y a la que representaban), el preboste (nombrado por el señor y encargado de las tasa e impuestos).
Todos ellos, junto con los escuderos y hombres buenos formaban el Regimiento. Reunidos en la cámara del Concejo, sus funciones eran electiva (elegían al nuevo regimiento), ejecutiva, judicial y legislativa, como en el resto de municipios.

Durante los primeros años de existencia de la villa, Bilbao se vio envuelta en numerosos altercados con los poderosos terratenientes de la zona: los Leguizamón, Zamudio, Arbolancha, Basurto... En la propia villa lucharán los Leguizamón contra los Zurbaran, los Arbolancha contra los Zurbaran...
Al comenzar el siglo XV las cosas parecen cambiar ligeramente. Tal vez la población se encontrase más que harta de aquel clima continuo de guerra, tal vez el desarrollo del comercio hiciera que ahora todos tuvieran mucho más que perder y bien poco que ganar.
Asi en 1435 se firma la paz entre los linajes de Bilbao y el Concejo de la villa. A partir de ahora se elegirá un solo alcalde, que represente a los vecinos y no a los bandos. En este año el rey de Castilla Juan II y XXII Señor de Vizcaya, desde 1.405 hasta 1.454, nombró un único alcalde, condenando a muerte a los cabecillas de ambos bandos.
Se fija taxativamente “... que había ser hombre común y no de bando o tregua alguna...”. Se crea también la figura de los fieles de mercaderes y, finalmente, se prohibe el acoso a los barcos, marinos y mercaderes que llegasen a la villa

miércoles, 7 de mayo de 2008

CAMPO VOLANTIN


GRAN VIA


GRAN CASINO DE ARTXANDA


EL CONSULADO DE BILBAO (y III)

Las primeras ordenanzas del Consulado de Bilbao datan de 1.531, siendo las más conocidas las de 1737, que sirvieron de pauta a muchos códigos de Comercio de países lationoamericanos, quienes entre los antecedentes en que se basaron para su creación, mencio­nan de forma explícita a las citadas ordenanzas del Consula­do de Bilbao.
Asimismo, dichas Ordenanzas sirvieron de pauta inspirado­ra para el Código de Comercio español de 1.829.

Durante este largo período, el movimiento del Puerto fue considerable. Más de trescientos barcos entraban en la Ría cada año, traficando con toda clase de productos. El declive del comercio flamenco, debido a la guerra, se compensaba con el bacalao, las grasas de Terranova, las relaciones con las colonias británicas de Norteamérica y la consolidación del tráfico lanero y ferretero.
El Siglo XVIII fue de gran prosperidad y auge mercantil para la Villa de Bilbao y su Puerto, del mismo modo que lo fue para el espacio económico internacional en el que se venía moviendo desde hace siglos, es decir, el mundo atlán­tico, ahora ya no limitado al ámbito noroccidental europeo, sino extendido a su gran proyección ultramarina y oceánica, que fue la razón fundamental del nuevo expansionismo eco­nómico de Europa.
En este Siglo XVIII continuó el cuidado de la Ría y el Puer­to por parte del Consulado.
El camino de Orduña fue otra de las grandes obras promovidos por el Consulado de Bilbao, con el rompimiento de la peña Goldecho, que permitió a partir de 1.775 una más cómoda relación comercial del Señorío de Bizkaia con Castilla.

La fase final del ciclo del Consulado de Bilbao, que corresponde a la pri­mera mitad del Siglo XIX, estuvo mezclada por acontecimientos políticos y bélicos de grave trascendencia.
Es en 1.811, al cumplir el Consulado los trescientos años de existencia, cuando empezó su proceso de decadencia al ver mermadas sus facultades con la introducción de la Comandancia de Marina y Capitanía de Puerto, que le sustrajeron sus tradicionales atribuciones sobre la navegación de la Ría y la política del tráfico portuario.
Otro golpe a esta señera Institución bilbaína se lo dio la Real Orden de 11 de enero de 1828, que obedecía a la nueva concepción centralista del Esta­do, y en virtud de la cual se designó una comisión encargada de redactar un Código de Comercio de carácter unificador para todo el Reino, cuyo texto fue aprobado el 30 de mayo de 1.829.
Las Juntas Generales de Guernica, celebradas en febrero de 1.830, aceptaron este Código y ordenaron su cumplimiento e implantación en todo el Señorío de Vizcaya, quedando derogadas y revocadas todas las leyes y ordenanzas de carácter comercial existentes.
El 19 de junio de 1.830 se estableció en Bilbao el nuevo Real Tribunal de Comercio, que sustituiría en sus funciones judiciales al antiguo Consulado de Bilbao, que había cubierto una de las más gloriosas etapas en la historia mercantil de la Villa.
Juntamente con el Tribunal de Comercio apareció la Junta de Comercio, que se arrogaba en las funciones directivas y gremiales del antiguo Consu­lado de Bilbao.
Un Real Decreto de 14 de diciembre de 1.859 creó la Junta de Agricultura, Industria y Comercio de Bizkaia, suprimiendo la anterior Junta de Comer­cio, ahondándose el espíritu centralista y unificador, propio de la filosofía decimonónica.
Dentro de la nueva tarea legislativa centralista, realmente demoledora para nuestras instituciones históricas, el 13 de enero de 1.868 se aprueba una Ley de Bases para la unificación de todas las legislaciones sobre actua­ciones mercantiles. Su finalidad es clara. En el Tribunal de Comercio sustitutivo del del Consulado, los jueces no son ya nombrados por los mercaderes, sino por el Rey, y la Jurisdicción ordinaria se impone con carácter general.
Todas las instituciones que nacen a partir de esa época están impregnadas de una filosofía de control directo por parte de los poderes centrales: la Jefatura económi­ca estatal, el Administrador de la Aduana, el Jefe de la Sección de Fomento, Administración de Correos y Telégrafos, Registro de la Propiedad, Registro Mercan­til y Delegación de Hacienda.Como premio de consolación de esta pérdida de la foralidad, el Real Decreto de 28 de febrero de 1.878 establece el Primer Concierto Económico, que permi­tió cierta autonomía administrativa de los cuatro terri­torios históricos vascos, delimitados a través de las Diputaciones.